En Belarús se esfuerzan por seguir los mandamientos del Señor. Lo aseguró el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, durante una reunión con el Patriarca de Moscú y de todas las Rusias, Kirill, informa el corresponsal de
BelTA.
“Una vez más, le agradezco que haya encontrado la oportunidad de visitar Belarús dentro del vasto territorio de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Estoy seguro de que Belarús está realmente en su corazón. Estoy seguro de que usted aprecia la tranquilidad y la paz en la que se desarrolla nuestro país. Aunque, como usted ve, como ha ocurrido anteriormente, e incluso en nuestra memoria, no todo es tranquilo alrededor de Belarús. Siempre hay alguien inquieto. Pero intentamos no infringir los mandamientos del Señor en Belarús. Por eso conseguimos vivir más o menos tranquilos», dijo el Jefe de Estado.
“No diré que somos muy ricos. Cada uno hace lo que puede, gana con la ayuda del Señor. Pero si trabajas, el Señor ayuda, también recordamos este mandamiento”, añadió Aleksandr Lukashenko.
“Correcto”, asintió el Patriarca.
El mandatario aseguró que, en este sentido, en Belarús se esfuerzan por organizar su vida: “Puede estar absolutamente tranquilo por Belarús”.
Aleksandr Lukashenko contó que recientemente había presentado una iniciativa para crear en Belarús centros religiosos de diferentes confesiones. “Tenemos la ortodoxia, el catolicismo. Son nuestras principales confesiones. Por supuesto, con una abrumadora superioridad de los ortodoxos. También hay católicos. En la Unión Soviética era la segunda confesión católica después de Lituania”.
En cuanto a los ortodoxos, ya se ha creado un centro religioso de este tipo en Zhiróvichi. “Hicimos mucho allí. Estuve allí y decidimos con el Metropolitano crear allí un centro ortodoxo de peregrinación. Hicimos mucho”, señaló el estadista.
“Una perla”, confirmó el Metropolitano Veniamín.
Aleksandr Lukashenko subrayó que junto con el Monasterio de Zhiróvichi se transformó toda la región: “No solo el monasterio, la iglesia. En general, todas las tierras alrededor”.
El Patriarca Kirill respondió a esto que el Señor le dijo a Adán: “He aquí la tierra, tómala y cultívala”.
Continuando la conversación sobre la creación de centros religiosos, Aleksandr Lukashenko declaró que los representantes de otras confesiones también se dedican a ello: “Tenemos centros que hay que poner en orden. Y para que no haya quejas – cada uno de nuestros ciudadanos elige el camino hacia su templo. Por eso llevamos a cabo estas iniciativas. No veo ofensas por parte de los musulmanes, los católicos o los judíos. No veo ningún problema. Lo han aceptado bien”.
“Así debe ser. Son religiones tradicionales y, en realidad, nunca han dado lugar a acciones negativas. A diferencia de las sectas de diversa índole, que tienen como objetivo dividir a los pueblos. Una secta es una parte. La filosofía y el objetivo de una secta es dividir. Esto es peligroso tanto para la vida religiosa del pueblo como para el Estado. Las religiones tradicionales no persiguen tales objetivos”, acentuó el Patriarca Kirill.